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Le daba igual si tenía hermana, padres y seres a su alrededor.
Siempre se tenía que hacer lo que ella decía, como decía, tener de todo y más.
No escatimaba en relacionarse con mucha gente diferente, pero no siempre jugaba limpio, especialmente desde que vio cómo muchas mujeres la repudiaban, por envidia o por no gustar.
Se creía una modelo a seguir, la única, la más. Debía reinventarse y cambiar, hacer cosas diferentes adaptarse. Y salía con todo tipo de hombres, no sólo españoles y mallorquines, hasta que se casó en una decesss ceremonias únicas.
Y cuando consiguió el puesto en las películas de televisión, ganó la fama y el prestigio pero perdió su identidad.
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