37.

Se querían, se querían mucho. Es mutuo, juvenil, amoroso, pasional. Era el sentimiento, el placer, la adaptación. Pero él sabía que, aunque la quería, ella no sería la mujer con quien se casase, yaxque quería alguien que le cocinase, le cuidase, no le llevase nunca la contraria, le dejase gruñir y holgazanear en casa, y admirar en los eventos sociales y familiares. Alguien más adaptable obrica, con quién tener una vida de lujos y no preocuparse por el dinero, la limpieza y poder ser excéntrico. Y ella sabía que no sería para siempre, no quería ser sólo una mujer dependiente, o que él viera lo glotona o poco arreglada que era cuando no estaba con él. No quería alguien que le dijese lo que tenía qué hacer, o que no quería verla con más nivel académico que él, quién preferiría tener dos empleos y seguir las modas y reglas familiares, en vez de aceptar sus gustos económicos, sus ideas saludables o libros feministas publicados.
Se querían, pero no estarían siempre juntos, y, aunque nunca ponían fin, sabían que no iba a ser eterno.

Comentarios

Entradas populares de este blog

2

3.